lunes, 10 de septiembre de 2018

Poseidón, el rey de los mares y los océanos



En la mitología griega, Poseidón, dios de los mares y los océanos, es el regente de las aguas y creador de terremotos. Devorado al nacer por su padre Cronos, fue salvado por su hermano Zeus.

Algunas historias cuentan que al igual que su hermano, Poseidón no fue devorado por Cronos, sino que fue escondido por su madre dentro de un rebaño de corderos. Según esta historia, fue criado por los Telquienes en la ciudad de Rodas.

Final de la Titanomaquia y ascensión como el rey de los mares y los océanos



Luego de ayudar a derrotar a su padre Cronos, Poseidón recibió el don de gobernar sobre los mares y océanos. Al igual que Zeus, recibió su arma (tridente) de mano de los cíclopes quienes lo forjaron con el fuego del tártaro.

Poseidón y su influencia en la historia
Éste tuvo parte en una disputa con Atenea por ser el protector de la ciudad de Atenas (sin nombre aún), en la contienda cada uno ofreció un don a la ciudad como regalo a los ciudadanos.

El regalo de Atenea fue un olivo mientras que Poseidón obsequió una fuente de agua salada al golpear el suelo con su tridente.

El don entregado por Atenea fue visto con mejores ojos y así se convirtió en patrona de la ciudad.

Este dios también influyó en la historia de la ciudad de Troya. Luego de ser obligado por Zeus a ayudar al rey de Troya, Poseidón creó una muralla alrededor de la ciudad para protegerla. Al notar el desagradecimiento del rey, Poseidón envió un monstruo marino a destruir la ciudad pero este fue derrotado por Heracles.

Familia e Hijos
Sus hermanos fueron Zeus, Hares (con quienes derrotó a su padre Cronos), Hera, Hestia, Deméter y Quieron. Su esposa fue Anfítrite cuyos hijos fueron Rodos y Tritón. Al igual que muchos dioses olímpicos, este Dios tuvo muchísimos otros descendientes con diferentes mujeres. Los más conocidos son: Rodo, Anteos, Caribis, Atlas, Polifemo, Arión y el velloncillo de oro.

jueves, 6 de septiembre de 2018

El castigo eterno de Tántalo



En la mitología griega Tántalo era hijo de la oceánide Pluto (ninfa hija de Océano y Tetis) y del propio Zeus (aunque muchos otros piensan que su padre era Tmolo, el dios con corona de roble que gobernaba el reino de Lidia). Lo cierto es que a pesar de su ubicación exacta (la cual como siempre difiere entre autores) Tántalo tenía muy buena relación con Zeus. El dios lo apreciaba tanto que continuamente lo invitaba a los banquetes que celebraba en el Olimpo. Tántalo acudía agradecido por la invitación, codeándose por tanto con los dioses más importantes de la mitología griega.

Existen varias versiones sobre los acontecimientos que desencadenarían el trágico destino de Tántalo. Unos dicen que simplemente se trastorno y comenzó a actuar indebidamente, otros tantos aseguran que su relación con los dioses hizo que comenzara a jactarse de ello con los mortales presentándose como alguien totalmente superior. Lo cierto es que todos coinciden en que fueron varias las acciones que propiciaron el cruel castigo de los dioses sobre su persona.

Al parecer fue revelando los secretos que había escuchado en la mesa a todos los mortales de su alrededor, además robó néctar y ambrosía que posteriormente repartió entre sus amigos. Sin duda alguna estos acontecimientos no gustaron nada a los dioses, y en concreto a Zeus. No obstante, la mayor ofensa que cometió fue descubierta antes de conocer estos hechos.

Tántalo invitó a los olímpicos a un banquete organizado en el monte Sípilo (algunos autores dicen que Corinto) descubriendo que no tenía alimentos suficientes para todos. A continuación, ya fuera por poner a prueba a los dioses o simplemente por el trastorno que presentaba, decidió servir un plato especial de su propia cosecha para poder alimentar a todas las deidades. Descuartizó a su hijo Pélope cociendo sus miembros y sirviéndoselos a sus invitados.

Cuando sirvió el guisado de Pélope, los dioses se dieron cuenta de lo que había en el plato y lo rechazaron horrorizados. Todos menos uno, Deméter, que estaba trastocada por la pérdida reciente de su hija Perséfone y sin darse cuenta se comió el hombro del pobre hijo de Tántalo.

Zeus entró en cólera y pidió a Hermes que volviera a cocer el cuerpo de Pélope colocándole un forjado de marfil de delfín en lugar del hombro y dotándole de vida a través de las moiras.

Zeus mato a Tántalo y fue colgado por orden del mismo en un árbol en el Tártaro. A partir de ese momento su condena sería pasar la eternidad colgado de ese árbol frutal sin poder beber agua ni comer nada. A pesar de estar sobre un lago cada vez que intenta coger agua con sus manos sólo accede a mojarse los labios secos y costrosos, propiciándole mayor sensación de sequedad y sed. Además, su árbol cuenta con un gran número de frutos deliciosos, pero cada vez que intenta agarrar uno con las manos una ráfaga de viento termina tirándolos al agua.

Como colofón a este castigo eterno Zeus colocó una enorme piedra encima del árbol, una piedra que amenaza constantemente con aplastar su cráneo. Esto respondía a uno de los últimos crímenes de Tántalo en el que además de robar el mastín de oro de Zeus, posteriormente juró por el dios que no había escuchado nunca nada acerca de ese ser. Algo que sólo sirvió para incrementar la ira descomunal de Zeus.

En la necrópolis Dashur Hallaron restos de una nueva pirámide en Egipto

Pertenece a la dinastía XIII faraónica (1797-1650 a.C.) y la parte que pudieron descubrir hasta ahora se encuentra en buen estado de conservación. 


Vista general de los restos arqueológicos descubiertos en la zona norte de la pirámides del rey Seneferu, en la necrópolis de Dahshur, a 40 kilómetros al sur de El Cairo (Egipto), en una foto sin fechar facilitada hoy, 3 de abril de 2017. (EFE)


Una misión de arqueólogos egipcios halló los restos de una pirámide de la dinastía XIII faraónica (1795-1650 a.C.), en una excavación en la necrópolis de Dahshur, situada al sur de El Cairo.

Según el director del Departamento de Antigüedades egipcio, Mahmud Afif, citado en un comunicado, el hallazgo ha sido realizado al norte de la pirámide del rey Seneferu, de la IV dinastía (2613-2494 a.C.).


Vista general de los restos arqueológicos descubiertos en la zona norte de la pirámides del rey Seneferu, en la necrópolis de Dahshur, a 40 kilómetros al sur de El Cairo (Egipto), en una foto sin fechar facilitada hoy, 3 de abril de 2017. (EFE)


La parte descubierta de la pirámide se encuentra en un buen estado de conservación, según el jefe de la administración central de Guiza y El Cairo, Alaa al Shahat, que mostró su convencimiento de que la excavación revelará "pronto" otras partes de la estructura.

La zona excavada hasta ahora muestra una zona del interior del mausoleo que consiste en un corredor que desciende hasta el fondo de la pirámide. Por la curvatura de sus lados, se cree que sería el primer intento de la época para construir una pirámide con bordes más suaves. En la necrópolis están enterrados funcionarios de alto rango y cortesanos.


Vista general de los restos arqueológicos descubiertos en la zona norte de la pirámides del rey Seneferu, en la necrópolis de Dahshur, a 40 kilómetros al sur de El Cairo (Egipto), en una foto sin fechar facilitada hoy, 3 de abril de 2017. (EFE)


Además, ha quedado al descubierto una cámara que se comunica con una rampa ubicada en el sur de la pirámide y con una habitación del oeste de la estructura, explicó el director general de necrópolis de Dahshur, Adel Okasha.

Okasha agregó que encontraron un bloque de alabastro blanco de 15 centímetros de ancho y 17 de alto en el que hay grabadas 10 líneas jeroglíficas verticales. Además se ha encontrado un dintel de granito y bloques de piedras que muestran el diseño interno de la pirámide


miércoles, 5 de septiembre de 2018

ARCONTE



Los arcontes son seres celestiales enviados por una deidad para cuidar, vengar o juzgar las injusticas que se producen en nuestro plano material.

UN PODER ANTIGUO
Los arcontes son verdaderas autoridades de la moral y la ética, y han existido desde el nacimiento de los dioses. De hecho, la palabra arconte, del griego “archai”, significa origen o comienzo.

En la antigua Grecia se conocía como arcontes a los habitantes destinados a convertirse en la autoridad suprema, fuese política o religiosa. Dictaban las normas, las hacían cumplir e impartían castigos a los descarriados.

UN PUNTO DE VISTA MÁS MITOLÓGICO
La figura del arconte ha sido reconocida en numerosas mitologías y civilizaciones como la celta y la azteca, y algunas han conseguido nombrar hasta 12 arcontes. Esto no significa que no haya más, sino que nunca se han materializado en nuestro plano.

Los arcontes son eficaces y poderosos intermediarios. Son la conciencia y, en cierto modo, el ente físico que se encarga de llevar a cabo todo lo que el dios necesita ejecutar. Son La Autoridad.

Es lógico pensar que estos seres poseen un gran poder, pero hay mucho más. Su fuerza y gracia son celestiales, divinas. No necesitan hablar, aunque lo hagan, y no necesitan luchar, aunque porten armas arcanas. Su mera presencia es una revelación que despeja la mente y el espíritu.

CARACTERÍSTICAS DEL ARCONTE
Suelen aparecer bajo la forma de un humano, hombre o mujer, de piel y cabello azul, blanco o dorado. La mayoría posee enormes alas angelicales aunque no las necesitan para volar y moverse a voluntad. Pueden teleportarse y estar a cada segundo en un lugar distinto.

Los arcontes hablan su propia lengua celestial y la lengua infernal. Aun así, pueden comunicarse con cualquier otro ser usando su empatía, de manera que se hacen entender aunque no se conozca ni una palabra del idioma angelical.

El aura del arconte es una de sus cualidades más llamativas. Cuando el arconte se manifiesta, su aura es de pura bondad y sus ojos se muestran comprensivos y llenos de amor. Si el arconte debe tomar una actitud más correctora, su aura se transforma en un amplio halo luminoso de protección para sí mismo y para las criaturas de buen corazón que estén presenten. Si el arconte debe mostrarse hostil ante una criatura malvada, su aura se convierte en halo amenazador sediento de justicia al que muy pocas criaturas infernales escapan, ya que debilita y merma la voluntad.



Un arconte presenta también la capacidad de atravesar la oscuridad y la penumbra con su mente, permitiendo a sus ojos ver todo lo que esconden las sombras.

EL ARCONTE EN ACCIÓN
Un arconte procura no hacer nunca daño. Es raro que luche contra un enemigo y, si lo hace, usa su poder para neutralizar, no para dañar. Sin embargo, si su oponente es realmente malvado, puede provocar la temida ira del arconte. En ese momento el arconte se convierte en la venganza personificada y no dudará en usar todos sus recursos para atacar y castigar a la criatura.

Parte de este enorme poder es amplificado por el arma que portan. Suelen usar espadas, tridentes o lanzas rúnicas. Estas runas arcanas poseen la capacidad de ampliar los poderes sobrenaturales y celestiales del arconte hasta el punto en que pareciera que el mismo dios que envía al arconte se hubiese personado. Es por eso que estas armas no se usan realmente para la lucha cuerpo a cuerpo. Los arcontes no necesitan luchar físicamente, aunque pueden hacerlo si lo desean.

Los arcontes presentan, además, ciertas resistencias naturales que los hacen más invulnerables. Pueden crear círculos mágicos contra el mal y no se ven afectados por los elementos como el frío, los rayos, etc.


lunes, 3 de septiembre de 2018

Descubren una 'ciudad perdida' del Imperio inca en medio de la jungla peruana

La construcción prehispánica se ubica a unos cuatro días de marcha desde la población más cercana.



El legado que nos dejó el Imperio inca es tan vasto que incluso a día de hoy afloran huellas de esta civilización precolombina, como las halladas recientemente por cuatro expedicionarios independientes en medio de la selva de Cusco, informa el diario 'Correo'.

La ciudadela fue encontrada por comuneros de la provincia cusqueña de Calca que se animaron a emprender un largo viaje al lugar, situado a cuatro jornadas de caminata desde la población Sacramento. "Primero se suben las montañas y luego se baja al llano, es un terreno muy difícil y complicado", explica uno de los investigadores, el comunero Javier Paso.



Los cuatro viajeros constataron la existencia de construcciones parecidas a las de la civilización inca, entre ellas muros, terrazas y hasta viviendas. "Nosotros lo llamamos 'la Ciudad Perdida', aunque esperamos que los profesionales puedan decirnos cómo se llama de verdad y contarnos exactamente de qué se trata", comenta Javier Alegre, alcalde del centro poblado de Qorimayo, que sugiere que el lugar hallado podría corresponderse con la mítica urbe incaica Paititi perdida en los Andes.

"Nosotros ya sabíamos de este lugar por historias que nos contaban nuestros abuelos y que pasaron de generación en generación, no podemos decir de que se trata del Paititi, pero creemos que puede ser la entrada al Paititi", conjetura el alcalde.



La expedición fue coordinada con el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado de Perú (Sernanp) y la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco. Sin embargo, hasta ahora no se han emitido informes de expertos sobre la misteriosa procedencia de la ciudadela en la jungla peruana.